En respuesta a las crisis mundiales, la Cumbre sobre los ODS lanzó una nueva fase de acción acelerada sobre los Objetivos de Desarrollo Sostenible

Los líderes mundiales hicieron una promesa global histórica para garantizar los derechos y el bienestar de todos en un planeta sano y próspero cuando acordaron la Agenda 2030 y los 17 ODS en 2015. Sin embargo, en la mitad del camino de la implementación de los ODS, estos se encuentran en peligro. Decenas de millones de personas han caído en la pobreza desde 2020. Más de 110 millones de personas se han visto obligadas a desplazarse. Las desigualdades han empeorado, sobre todo en el caso de las mujeres y las niñas. Muchos gobiernos se ven obligados a elegir entre el pago de la deuda y la inversión en sanidad y educación. La emergencia climática está causando estragos en las vidas y los medios de subsistencia. Los países en desarrollo y las personas más vulnerables del mundo siguen llevándose la peor parte de estas crisis. 

"Los ODS no son sólo una lista de objetivos. Son portadores de las esperanzas, los sueños, los derechos y las expectativas de las personas de todo el mundo", dijo el Secretario General de la ONU, António Guterres. "Sin embargo, hoy en día, solo el 15% de los objetivos van por buen camino. Muchos van a la inversa. En lugar de no dejar a nadie atrás, corremos el riesgo de dejar atrás los ODS." 

La Declaración política 

Los dirigentes adoptaron en la Cumbre una declaración política decisiva (ENG)  orientada a la acción, en la que subrayan su compromiso colectivo de construir un mundo sostenible, inclusivo y próspero de aquí a 2030. 

Con un fuerte enfoque en los medios de implementación, y en particular, en la financiación para el desarrollo, la declaración reconoce que sin un salto cuántico en las inversiones para permitir una energía justa y equitativa, alimentos, transiciones digitales, y una transformación en la educación y la protección social robusta en los países en desarrollo, los objetivos simplemente no se cumplirán. 

Además, la declaración insta a una acción inmediata de Estímulo (ENG) para llevar a cabo los ODS propuesto por el Secretario General de la ONU, que pide un aumento masivo de la financiación para el logro de los ODS por valor de 500.000 millones de dólares cada año. También transmite el firme apoyo de todos los países a una reforma muy necesaria de la arquitectura financiera internacional para reflejar mejor la economía mundial actual. 

"Me siento muy alentado por el detallado y amplio proyecto de declaración política que se está examinando hoy aquí, especialmente por su compromiso de mejorar el acceso de los países en desarrollo al combustible necesario para el progreso de los ODS: la financiación. Esto puede cambiar las reglas del juego a la hora de acelerar el progreso de los ODS", declaró el Secretario General. 

Compromisos mundiales y nacionales  

Más de 100 países presentarán compromisos nacionales para la transformación de los ODS que incluyen transiciones prioritarias y áreas de inversión, estableciendo puntos de referencia nacionales para reducir la pobreza y las desigualdades para 2027 y fortaleciendo los marcos institucionales para apoyar el progreso de los ODS. Además de estos compromisos nacionales, se espera que los países desarrollados y otros países que dispongan de la capacidad necesaria asuman compromisos globales individuales basados en la propuesta del Secretario General de un Estímulo de los ODS y en medios de implementación más amplios, como el cumplimiento de los compromisos de  Cooperación Internacional (ODA), la suspensión de los pagos de la deuda y el acuerdo sobre mecanismos de financiación innovadores.