María Cecilia Olate: “Ser cuidadora es una responsabilidad muy grande porque cuidamos la vida y con este nivel de importancia debemos ser reconocidas”

“Me atrevería a decir que ser cuidadora de personas mayores será una carrera muy valorada en el futuro porque la población envejece cada vez más", señala.
María Cecilia Olate es cuidadora profesional de personas adultas mayores. Tiene 57 años y actualmente estudia técnico de trabajo social. Es una mujer con vocación de servicio con un objetivo claro: continuar ayudando a las personas mayores en situación de abandono de la comuna de Santiago, en Chile.
Ejerce esta profesión desde hace siete años, luego de tocar muchas puertas en búsqueda de empleo, hasta que encontró una oportunidad de laborar como cuidadora. “Yo era secretaria de gerencia, perdí mi trabajo y, obviamente, por el problema de la edad, a una le cuesta encontrar trabajo. Un día tuve la oportunidad de encontrar una capacitación de cuidadoras con conocimiento en enfermería, lo cual encontré fantástico y de ahí hice mi práctica en la Fundación Hogar de Cristo. En ese momento me enamoré de los cuidados”.
En agosto de este año, Cecilia, junto a otras 30 cuidadoras, fue reconocida y certificada como cuidadora en atención primaria, gracias a la iniciativa impulsada por ONU Mujeres y OIT en el marco del proyecto del MPTF COVID-19, en colaboración con ChileValora, el Servicio Nacional de Capacitación y Empleo (Sence), el Servicio Nacional del Adulto Mayor (Senama), la Universidad Federico Santa María y la Municipalidad de Santiago. Esta certificación tuvo como objetivo reconocer y profesionalizar las competencias desarrolladas por este grupo de mujeres, así como fortalecer una infraestructura de cuidado que garantice la calidad de la atención, experiencia y conocimiento de las necesidades que requiere la niñez, adultos mayores, personas enfermas y aquellas en situación de dependencia.

“Recibir un diploma y certificar el trabajo que vienes desarrollando desde hace años son pasos grandes. Para mí fue un logro grande, porque no solo estoy recibiendo un reconocimiento por parte de ONU Mujeres, sino también por ChileValora y esto a una le abre muchas puertas laborales. Al comienzo estaba nerviosa con esta evaluación porque teníamos que demostrar todos los conocimientos que teníamos, pero lo logré y estoy muy contenta por eso”.
Actualmente, Cecilia es parte del equipo del Programa Cuidados Domiciliarios adscrito al SENAMA, el cual entrega servicios de cuidados y apoyo para la realización de las actividades de la vida diaria de adultos mayores dependientes (con dependencia moderada a severa) que no tienen un cuidador principal, y que se encuentran en situación de vulnerabilidad socioeconómica, con el propósito de mejorar su calidad de vida y resguardo de su autonomía, dignidad e independencia.
“Para ser cuidadora hay que tener vocación, nosotras vemos casos muy tristes de abandono de personas mayores, sobre todo de sus familiares. Nosotras nos hacemos cargo del cuidado físico y emocional de estas personas, cada día es una experiencia nueva, aprendo mucho de ellos en cada conversación. No saben lo felices que se ponen cuando nos ven llegar, muchos de ellos dependen de nosotras para comer, ducharse o hacer sus trámites”.
Cecilia valora que los cuidados actualmente cobran mayor relevancia en la opinión pública y que además sean visibilizadas diversas organizaciones de la sociedad civil.
"Asumir el cuidado de las personas mayores es una responsabilidad de todos y todas, esto es corresponsabilidad social. Antes no se hablaba de cuidados, se asumía que era una labor que debía realizar un familiar, pero ahora diversas agrupaciones e instituciones hablan de la importancia de garantizar una vejez digna, como un derecho humano. Nosotras desde este programa nos encargamos de prestar un servicio de cuidado digno. Ser cuidadora es una responsabilidad muy grande porque cuidamos la vida y con este nivel de importancia debemos ser reconocidas”.
Dentro de los desafíos que tiene esta labor, la cuidadora plantea la necesidad de formación continua como la clave de fortalecer los servicios de cuidado. “Uno de los grandes desafíos que veo, además de la profesionalización, es la posibilidad de seguir capacitándonos. Esto fue lo que me motivó a estudiar técnico en trabajo social, para poder seguir ayudando a las personas mayores, no solo desde los cuidados, sino también a través de la gestión y articulación de redes para su bienestar físico y emocional”.

“Me atrevería a decir que ser cuidadora de personas mayores será una carrera muy valorada en el futuro porque la población envejece cada vez más y las personas jóvenes quieren tener menos hijos, ¿Quién se va a hacer cargo de esta labor? Nosotras, las cuidadoras profesionales. Ser cuidadora será una profesión muy demandada en Chile y en todo el mundo”.
El proyecto para la reintegración económica sostenible de las mujeres jóvenes, es una iniciativa del Sistema de las Naciones Unidas en Chile a través del trabajo coordinado de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), ONU Mujeres, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Oficina del Coordinador Residente. También hacen parte de este proyecto como organizaciones socias, el Ministerio de la Mujer y Equidad de Género, El Ministerio del Trabajo y Previsión Social, el Ministerio de Desarrollo Social y Familia; la Municipalidad de Renca, y la Municipalidad de Padre de las Casas.
Este programa conjunto es posible gracias a las contribuciones del Fondo de Respuesta y Recuperación de las Naciones Unidas por parte de los gobiernos de Holanda, Dinamarca, Suiza, Noruega, Suecia, República de Corea, Finlandia, Nueva Zelanda, Croacia, Islandia, Tailandia, Eslovaquia y Camboy
*Nota: Estas publicaciones buscan estimular un debate propositivo en torno a los principales temas de interés para el avance de la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres en América Latina y el Caribe. Los conceptos expresados por las personas entrevistadas para la producción de nuestros contenidos editoriales no reflejan necesariamente la posición oficial de ONU Mujeres y agencias del Sistema de Naciones Unidas.